Este capítulo reflexiona sobre la libertad que uno tiene a
la hora de tomar decisiones, del razonamiento que se emplea en estas al
elegirlas, ese razonamiento puede ser muy subjetivo porque todos tenemos diferentes percepciones de nuestro entorno que en ocasiones influye para tomar estas decisiones.
Dice que uno no siempre debe guiarse por
lo que la sociedad demanda, si no aplicar ese razonamiento que por naturaleza todo
ser humano tiene, para evaluar mejor las cosas cuestionándonos si estas de
verdad son buenas o malas.
Por esto el capitulo se titula “haz lo que quieras “porque
uno debe tener criterio propio a la hora de decidir y no dejarse llevar por lo
que los demás dicen. Obviamente este criterio no debe ser personal solamente, eso
sería incorrecto, porque no sería equitativo con los demás, lo correcto es
hacer un criterio más responsable que no siga costumbres, ordenes o caprichos y que evalué
cual es la mejor decisión que busque siempre al bien personal y social.
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